por Gerardo Otamendi
-Pasá, pasá rápido porque si no…
-¿Cómo se llama?
-Le puse Pepi.
-¿Y ese nombre?
-Lo saqué de una película que me gusta mucho, Los coristas. El personaje más tierno y más pequeño se llama Pepinot.
-Ah, sí. Muy buena película. Y muy fuerte también.
-Sí, lloré un montón.
-¿Y por qué le pusiste al perro un nombre de una
película tan dramática?
-Porque la historia de Pepi es un drama. Cuando
me separé de mi ex marido, me mudé a esta casa antigua, que es grande para mí…
Bah, en ese momento la sentía más grande. Me sentía mal, no me hallaba para
nada. Hasta que este chico (acaricia el cogote del perro) apareció.
-¿Cómo apareció?
-Rengueaba de una pata, supongo que lo habrá
atropellado un auto. Estaba flaco, con muchas garrapatas. Le empecé a dar de
comer, lo llevé al veterinario y cuando me quería acordar, estaba arriba de mi
sillón, mirando la tele.
-Ah, el perro también es crítico de cine.
-Sí, es como yo, cuando pongo una película de
acción con tiros y todos esos efectos, se pone nervioso y ladra.
-¿No te gustan las películas de acción?
-Algunas sí, otras no, como todo género. No es mi
género preferido. Si me das a elegir termino en los dramas y pequeñas
historias.
-¿Por qué?
-Porque soy muy sensible a la violencia,
entonces prefiero algo que me conmueva y me haga reflexionar. No me gusta ver
violencia por el simple hecho de ver violencia. ¿Me explico? El otro día estaba
haciendo zapping y enganché un programa muy amarillista, no me acuerdo el
nombre, pero mostraba cómo los chicos se drogan con paco.
-Ah sí, son tremendos.
-Bueno, la cuestión es que entrevistaron a una
nena que se prostituía para consumir esas porquerías. Y dejando de lado todo el
amarillismo de la nota, porque los usan para hacer rating y no los ayudan de
verdad, me hizo percha cuando la nena contestó que si hubiera podido estudiar habría sido jueza para defender a los niños.
Esas cosas me movilizan un montón.
-Vivimos en
un mundo cruel.
-Sí, y las
películas pueden hacer un aporte para la reflexión. Este tipo de programas no
sirven para eso, pero las películas sí.
-¿Cuál sería
la diferencia en el abordaje desde un programa periodístico y desde una película?
-Primero
que son actores, entonces vos no estás exponiendo a nadie. Segundo que en esos
programas muestran cómo se arruina la vida la juventud, no cuestionan las
instituciones ni proponen el cambio de nada, entonces no llaman a la reflexión.
-¿Todavía
se hacen cines debate?
-Sí, se
hacen. Y deberían hacerse más. Es una linda actividad social.
-Como Cinema
paradiso…
-Bueno,
Cinema paradiso tiene esa mística de una sociedad unida, disfrutando de una
actividad en conjunto, pero no tiene cine debate.
-También
sos crítica literaria… ¿de dónde surge esto?
-Los críticos
somos personas frustradas…
-Epa.
-Mis
colegas me van a matar. Pero yo lo veo así. Hubiésemos querido ser grandes
cineastas, actrices famosas y escritores de gran trayectoria, pero no pudimos.
Entonces nos dedicamos a criticar las
obras de los demás.
-¿Qué
hubieses querido ser y no fuiste?
-Me hubiese
gustado escribir como Alejandra Pizarnik, actuar como Ingrid Bergman y hacer
cine como los hermanos Dardenne.
-¿Todo eso?
-Sí, todo
eso. Pero sobre todo poeta.
-¿Tenés
escrito algo?
-Sí, varios
poemas, pero son muy malos. Creo que soy buena para criticar, ese es mi
objetivo en el mundo.
Me hiciste acordar de Pepinot! Qué tierno ese nene. Hermosa peli.
ResponderBorrarSí, hermosa película. Me gustan esa películas en que los profesores o maestros que son buenos y severos en la justa medida.
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