Repetir, repetir es mi trabajo.



por Paulo Mallozzo



 

La repetición en la industria del cine.



Afiches de películas románticas.“A mi hijo le encanta Cars, lo mira una y otra vez”, confiesa mi amiga Laura. “Le pregunto si quiere poner otra película, pero no hay caso, siempre terminamos viendo autos. Como me aburro, le digo: a que ahora hace tal cosa tal personaje. Y me mira extrañado, como si fuera una adivina”. Es común que los niños opten por ver lo mismo, eso les da seguridad, afirma una psicóloga. ¿Pero es un fenómeno que le ocurre solo a aquellas personas que calzan menos de treinta de zapatilla?

Una viejita que tiene problemas de memoria dice: “lo bueno de todo esto es que cada película que veo es como si fuese la primera vez”. Adultos, con o sin problemas de memoria, repiten las películas que más le gustaron. Como prueba tenemos los canales de cine, que infinidad de veces pasan los mismos títulos. ¿Nunca les ha pasado hacer zapping y encontrar la misma película en dos canales diferentes? Pero qué amables son las empresas, que piensan en nosotros y nos dan para elegir. Uno tiene la posibilidad de enganchar la película en el momento que quiera, optar si la ve doblada o con subtítulos. La industria del cine no existiría si fuera un terrible gasto solo por par de veces. Todo esto no ocurriría si no tuviéramos una predisposición para la repetición.
¿Cuántas veces esperamos que comience una película y vemos alguna imagen o el título y decimos “ah, si, ya la vi, trata de un joven que pierde a su padre en la guerra…” Y optamos por seguirla viendo o cambiar de canal. De eso se trata, de gustos. A mí me gusta el chocolate y en cuanto puedo lo vuelvo a comer. ¿Por qué? Porque me gusta. Es completamente normal que un niño quiera ver muchas veces una película. Porque es seguro que le va a gustar. Que no recuerde algunas partes, no significa que no sepa sus preferencias.

Otra cosa muy distinta son las burdas copias de argumentos y ejecución  que se aprovechan de nuestra condición humana tolerante a la repetición. Big (1988), película protagonizada por Tom Hanks, ha sufrido una burda duplicación con 13 going 30 (2004). Es el mismo argumento pero con pequeñas modificaciones. Ambos frente a una situación negativa desean tener alrededor de 30 y mágicamente lo logran. Conocen a su amor de grandes, trabajan en los lugares donde hubiesen querido trabajar y  finalmente vuelven al estado normal. Otra falta de originalidad se encuentra en los diseños de tapa. Si veo un par de piernas es una comedia con contenido picante. Un hombre y una mujer de espaldas o en la cama son la dupla de una película romántica. Más de dos en una cama es para agregar que es una comedia romántica. Para los thrillers un ojo misterioso y para el misterio un hombre de espaldas con sobretodo negro. No es para nada raro ver los colores negro, blanco y naranja de fuego en las películas de acción, mientras el protagonista sostiene un arma de buen calibre. Las películas son productos. Cuando voy al supermercado, si veo algo verde ya se que es ligth, algo negro una delicatesen.

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