por Anabella
Esta película está basada en una novela del mismo nombre, que fue publicada en 1989. La autora de la novela y del guión de la película es Laura Esquivel. Recuerdo que la leí hace mucho, cuando era adolescente. Me había fascinado la historia. Es una típica historia de amor y desamor.
Cada capítulo del libro se encuentra organizado por recetas que simbolizan sentimientos y situaciones. Tita, la protagonista de esta historia, se cría en la cocina con la señora encargada de los quehaceres domésticos. Su padre había muerto al nacer, por tanto su madre, desolada, no se ocupa demasiado de ella. De allí sus conocimientos y conexión con los aromas de la cocina. Se podría decir que nace en una situación de desgracia con un horizonte desgraciado. Tita, al ser la hija menor, debe mantenerse soltera para cuidar de su madre, Elena. Es así como tiene que rechazar la propuesta de matrimonio de su vecino Pedro.
Pedro decide casarse con la hermana mayor, Rosaura, para estar cerca de Tita. Al principio, la pobre Tita no sabrá las verdaderas razones de Pedro. Sufrirá preparando la torta de bodas para el casamiento de su hermana. Tejerá para descargar su bronca e impotencia.
Es una historia de amor ambientada en vísperas de la Revolución Mexicana de 1910. Algunos fragmentos hacen alusión a los saqueos y violaciones que cometían hacia los campesinos. Los rebeldes estarán personificados en la otra hermana de Tita, Gertrudis, que desnuda, sin importarle nada, galopa a caballo con su futuro marido en busca de una nueva vida. Toda la situación estaba como agua para chocolate.
Uno lee el libro y ve la película pensando ¿ya muerta la madre, habrá obstáculos contundentes contra este amor? ¿Podrá Tita ser feliz? Leer un libro siempre es mejor, pero la película, si bien posee algunas escenas que no están en la novela original, es bastante fiel. Algunos elementos fantásticos serán incorporados por su director, Alfonso Arau, para darle impacto a actuaciones que no deslumbran por parte de Marco Leonardi (Pedro) y Lumi Cavazos (Tita). El mejor papel y actuación se lo lleva Regina Torné, quien hace de la Sra. Elena, madre de Tita. Una película para ver después de leer el libro.
Puntaje: 6
Pedro decide casarse con la hermana mayor, Rosaura, para estar cerca de Tita. Al principio, la pobre Tita no sabrá las verdaderas razones de Pedro. Sufrirá preparando la torta de bodas para el casamiento de su hermana. Tejerá para descargar su bronca e impotencia.
Es una historia de amor ambientada en vísperas de la Revolución Mexicana de 1910. Algunos fragmentos hacen alusión a los saqueos y violaciones que cometían hacia los campesinos. Los rebeldes estarán personificados en la otra hermana de Tita, Gertrudis, que desnuda, sin importarle nada, galopa a caballo con su futuro marido en busca de una nueva vida. Toda la situación estaba como agua para chocolate.
Uno lee el libro y ve la película pensando ¿ya muerta la madre, habrá obstáculos contundentes contra este amor? ¿Podrá Tita ser feliz? Leer un libro siempre es mejor, pero la película, si bien posee algunas escenas que no están en la novela original, es bastante fiel. Algunos elementos fantásticos serán incorporados por su director, Alfonso Arau, para darle impacto a actuaciones que no deslumbran por parte de Marco Leonardi (Pedro) y Lumi Cavazos (Tita). El mejor papel y actuación se lo lleva Regina Torné, quien hace de la Sra. Elena, madre de Tita. Una película para ver después de leer el libro.
Puntaje: 6
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